LOS NOVIOS DE NUESTROS AMIGOS

Hace poco nos llamo por teléfono nuestro amigo X...tengo novio!!.

Como ya lo conocemos nos quedamos igual, pero como somos educadas preguntamos, ¿Es el que nos presentaste hace un mes?, no!! (yo creo que de aquel ya ni se acordaba, cosa bien comprensible), ¿El de hace 15 días? , no que va!!, ¿El de la semana pasada?, uy no , que dices, a ese le he dicho que tengo en casa a la familia para que no venga y coincida con este, que es húngaro de Hungría y acaba de llegar de su país, ahhh... ¿Nos invitáis mañana a cenar?, Así lo paseo un poco y de paso os lo presento.

Como nosotras viajamos mucho a través de los novios de nuestros amigos, ni que sea por medio de la conversación, le dijimos que si.

Y por fin llego el día de la cena, el húngaro se llama Sandor (cosa del todo irrelevante pero que a mi me recuerda el nombre de alguna pastilla efervescente), alto, delgado, buen tipo y con una sonrisa permanente, algo muy de agradecer; Nuestro amigo nos aclara que no habla ni una palabra de español, Ole!, por que nosotras tampoco hablamos ingles, empezamos bien ...

Mientras cenamos nos hace un breve resumen de cómo se han conocido ( breve como la realidad), a través de Internet, explicándonos que Sandor es pollero en su país no sin aclararnos que ser pollero en Hungría es algo estupendo, la verdad es que nos daría igual si trabajara en la NASA.

Ellos, es decir mi amigo, se han presentado a la cena con un montón de embutidos deliciosos y yo he cocinado una fideua , comida consistente en unos fideos a la cazuela con pescado que se acompañan optativamente con ali oli.

En medio de la comida el húngaro (Sandor) nos hace saber que las gambas son unas grandes desconocidas para el, no tiene ni idea de cómo se comen, mi amigo en ingles con paciencia de “enamorado” le explica cuatro ideas básicas, hay que chupar la cabeza y luego quitarles las patitas antes de pelarlas (dios mió, como suena esto) , el caso es que Sandor asiente y acto seguido se mete una gamba entera con cáscara y todo en la boca y comienza a masticarla con aplicación (Jesús!!) , como somos personas educadas y no queremos herirle, los tres ponemos cara de...esto lo hemos visto hacer toda la vida, aunque en el fondo de nuestros ojos se debía adivinar una lucecita de alarma (como puede masticar eso?!!!) , a continuación hace algo extraordinario (extra-ordinario) , coge un recipiente en el que se le explicó que iban las cáscaras y escupe en el!!! el chicle gamba que casi le ahogaaaaaaaaaaaa , nos mira con una sonrisa de oreja a oreja y ojitos felices de niño aplicado, parecía decir : lo he hecho bien eh? ; Que ternura , el resto de la cena después de aquello transcurrió sin sorpresas y desde entonces no podemos ver una gamba sin acordarnos de Sandor, el húngaro que vino de Hungría ( estoy tentada de acabar diciendo...en una noche fría , pero no lo haré)

Sasha